Son mis propias experiencias las que me ayudan a comprender y entender a quien tengo delante, ya que creo que para acompañar es necesario haber hecho trabajo personal previo, el mío comenzó cuando tuve una experiencia cercana a la muerte con 26 años, que me llevó a replantearme muchas cosas y buscar maneras de vivir de forma mas autentica y plena. Posteriormente, tras una crisis personal, tuve claro que quería acompañar a las personas porque me fascina el ser humano y su capacidad de seguir adelante, y quería ayudarlas a conocerse y aceptarse en todas sus facetas, tanto en sus luces como en sus sombras.

En 2013 di un giro a mi vida y me formé como coach. Afronté muchos retos y comencé a acompañar muchos grupos de inteligencia emocional y auto conocimiento mientras me seguía formando en varias disciplinas. Sin embargo, mi formación como actriz me decía que el cuerpo era el gran olvidado en todas ellas. La formación en Proceso Corporal Integrativo, aportó una nueva mirada a mi proyecto profesional, que se enriqueció con la formación en Gestalt y el estudio del Eneagrama.

En medio de todo esto, Movimiento Inteligente llega a mi vida para transformarla, cuando buscaba técnicas corporales que no violentaran mi cuerpo y que me ayudaran a lograr mayor bienestar después de muchos años de dolor crónico por una lesión. Post-graduarme en esta disciplina me ayudó a utilizar el cuerpo como vehículo de consciencia desde un enfoque muy sencillo, amoroso y liberador que genera profundas transformaciones